LA CIENCIA AL SERVICIO DE LA TAUROMAQUIA

Belmonte en el Batán. Imagen cedida por el Doctor Gil Cabrera

A principios del mes de Julio, las instalaciones del Batán fueron el punto de partida para un encuentro de investigadores nacionales y portugueses. Todos los asistentes compartían un único objetivo: La Tauromaquia en general y el toro bravo en su singularidad.

Promovida por la asociación, Tauromaquias Integradas, la reunión, de gran importancia cultural y científica para la Tauromaquia, comenzó con la intervención del periodista Don José Carlos Arévalo que en su introducción expuso una visión general del objetivo de T.I para dar paso a la presentación personal y labor de investigación desarrollada por los asistentes sobre la lidia, el toro bravo y las escuelas taurinas.

Al finalizar su disertación, el periodista cedió la palabra a Don Julio Fernández Sanz, veterinario y especialista en ganado de lidia. El ponente, comenzó su exposición dando a conocer las investigaciones que se están desarrollando en torno a la nutrición, patologías y en especial sobre los útiles de la lidia. En su exposición, apuntó datos muy interesantes sobre los estudios que se están desarrollando en la configuración del estoque y forma del descabello.

El segundo turno de exposición, correspondió  al doctor en biología Don Fernando Gil Cabrera que desarrollo su tesis doctoral en la facultad de veterinaria sobre la fisiología del toro.    Inició su exposición con la pregunta que le había llevado a sus investigaciones y desarrollo de su tesis doctoral: ¿Por qué embiste el toro bravo?

En sus estudios, tras efectuar numerosas comparativas sobre la acometida del toro desde los tiempos de Belmonte hasta la lidia actual, el Doctor Gil Cabrera llega a las siguientes conclusiones.

 La primera, giraría en torno a la capacidad adaptativa que tiene el animal. El toro es muy eficiente en la respuesta al estrés que le genera la lidia. En su composición química, existen una serie de hormonas que le preparan, al igual que a los humanos, para luchar o huir en determinadas situaciones.  La respuesta a la lucha residiría en la capacidad que tiene el toro de generar endorfinas en los momentos de estrés que supondría la lidia. Al mismo tiempo, estas endorfinas, mitigarían el dolor que pudieran suponer los tercios de la lidia.

Así mismo, la importancia de la hormona denominada dopamina, relacionada con la agresividad y la motivación, jugaría un papel transcendente en la acometida del animal. En el toro de lidia, se observó que, a mayor nivel de dopamina, mayor acometividad y motivación por embestir, sin olvidar, como se dijo anteriormente, la selección que durante años vienen desarrollando los ganaderos de bravo.

Una vez expuestos los motivos de acometida del toro bravo, el Doctor Gil Cabrera, habló del patrimonio que significa el toro de lidia para nuestro país y para el mundo animal en general.  Finalizó la disertación, reivindicando la Venta del Batán cómo uno de los hábitats en dónde debería volver la imagen real de la contemplación del toro antes de la corrida. Imagen que quedó grabada para muchos de los presentes en la retina de la memoria.

A las investigaciones anteriores, se unen las que el Doctor en Psicología Don David Guillén Corchado, profesor de la UNED, ha llevado a cabo sobre el estudio comparativo del bienestar subjetivo o búsqueda de la felicidad, entre los alumnos de las escuelas de Tauromaquia, frente a un grupo de alumnos de educación reglada. El Doctor Guillén considera que el bienestar subjetivo en la vida adolescente será un indicativo del bienestar en la vida adulta.

Según las investigaciones llevadas a cabo en este campo de la psicología y fruto de la comparativa entre los dos grupos de adolescentes, el Doctor Guillén, llega a las siguientes conclusiones:

Primera. – De las horas de trabajo empleadas con varios grupos de uno y otro alumnado se desprende que los alumnos de los alumnos de escuelas de Tauromaquias tienen más tesón, persistencia y motivación que los alumnos de educación reglada.

Segunda. – Así, la autoeficacia, apertura a la experiencia, afabilidad y tesón resultó ser más notable en los alumnos de escuelas de Tauromaquias, hecho que conllevaría un mayor bienestar social y a una forma de afrontar los problemas desde una perspectiva más adaptativa ya, desde niños. Referente al balance afectivo, también se demostró una mayor afectividad en los alumnos de escuelas de Tauromaquias, aunque la intensidad fuera más baja que en los segundos.

El doctor Guillén, finalizó su discurso, exponiendo tres interacciones interesantes entre los dos grupos de alumnos.

1.- El afrontamiento improductivo, no deseable para el bienestar emocional. Los alumnos de las escuelas taurinas lo utilizan de manera homogénea. Por el contrario, el otro grupo de alumnos, cuando presentan baja satisfacción, utilizan en mayor medida este tipo de afrontamiento que no es el positivo.

2.- La extraversión es mayor y más homogénea en los alumnos de tauromaquia que en los del grupo de educación reglada. Estos últimos, son más introvertidos con bajo bienestar.

3.- El afrontamiento. Cuando existe un alto bienestar subjetivo, los dos grupos responden de manera positiva. Cuando, el bienestar es bajo, los alumnos de escuelas taurinas utilizan un tipo de afrontamiento adaptativo y positivo.

Las conclusiones de este estudio evidencian:

Que los alumnos de escuelas taurinas emplean recursos psicológicos adaptativos.

Que la extraversión es un rasgo de personalidad importante para los alumnos de escuelas secundarias, pero no para los de escuelas taurinas.

Que los alumnos de escuelas taurinas con bajo bienestar hacen uso de un afrontamiento positivo. En los estudiantes de tauromaquia, se regula bastante la emoción.

 Que la práctica de la tauromaquia genera emociones positivas que no se encuentran en el grupo de alumnos de escuelas regladas.

 Que los alumnos de tauromaquia presentan un perfil psicológico adaptivo importante, frente al grupo de enseñanza reglada.

Estos resultados se asimilan a los encontrados en estudios sobre buena salud física y mental. Similares a los resultados de estudios sobre tolerancia a la frustración. También quedó demostrado que, con la práctica de la Tauromaquia, se pueden prevenir conductas nocivas para la salud.

Finalmente, Don Rafael Lara, doctor en Farmacia, expuso las investigaciones que se están desarrollando sobre lo que denomina “Arte de Matar”. Para Rafael de Lara, hablar de suerte de matar se asemejaría más a un lenguaje coloquial que no tiene nada que ver con la Tauromaquia. El doctor de Lara, contempla la palabra arte, en vez de suerte para designar el desenlace en una corrida de toros. Al mismo tiempo, hizo hincapié en que “el matador de toros tiene que dominar el arte de matar a través de una técnica que se aprenda en las escuelas taurinas”.  Una técnica terapéutica basada en la fortaleza y agilidad de la muñeca, para que, al entrar a matar, si se encuentra un obstáculo óseo el estoque pueda solventarlo. Bajo su punto de vista, considera importante vincular la Tauromaquia a la ciencia y a la ilustración.

En su disertación, expuso una serie de investigaciones que se están llevando a cabo sobre la puya en la lidia.

Así mismo, sobre el dolor del animal durante la lidia, expuso estudios que demuestran que la adrenalina generada por el toro en la lidia, tiene un efecto anestésico tan potente que anula la sensación de dolor. Por tanto, el dolor en el toro no existe. Existe un reflejo. El dolor, tiene un componente emocional. El toro no tiene la estructura cerebral como para mentalizar el dolor y añadir la carga emocional que ello supone.

 

ASISTENTES A LA REUNIÓN

DON JOSÉ MIGUEL ARROYO “JOSELITO”, MATADOR DE TOROS (T.I). DON JOSÉ LUIS BOTE ROMO, MATADOR DE TOROS, MIEMBRO DE T.I.DON ENRIQUE MARTÍN ARRANZ, MIEMBRO DE T.I. DON JOSÉ C. ARÉVALO, PERIODISTA, FUNDADOR DE LA REVISTA 6 TOROS 6, MIEMBRO T.I. DON FERNANDO GIL CABRERA, DOCTOR EN BIOLOGÍA, MIEMBRO T.I. DON RAFAEL DE LARA GARCÍA, DOCTOR EN FARMACIA, MIEMBRO DE T.I. DON JULIO FDEZ SANZ, VETERINARIO ESPECIALIZADO EN GANADO DE LIDIA, MIEMBRO DE T.I. DON DAVID GUILLÉN CORCHADO, DOCTOR EN PSICOLOGÍA, MIEMBRO DE T.I. DOÑA EMILIA RIESCO VÁZQUEZ, DOCTORA EN SOCIOLOGÍA Y PROFESORA DE LA UNIVERSIDAD DE SALAMANCA. DOÑA MÓNICA PÉREZ ALAEJOS, DOCTORA EN COMUNICACIÓN Y PROFESORA DE SOCIOLOGÍA Y COMUNICACIÓN EN LA UNIVERSIDAD DE SALAMANCA. DON LUIS CAPUCHA, DOCTOR EN SOCIOLOGÍA Y PROFESOR DE CIENCIAS POLÍTICAS Y POLÍTICA PÚBLICA DE LA UNIVERSIDAD DE LISBOA. DOÑA PILAR GUARDIOLA FLORES, ABOGADO Y DOCTORA EN CIENCIAS DE LA INFORMACIÓN.

Pilar Guardiola Flores

Presidente del Ateneo Cultural Taurino de Madrid

 

 

 

 

 

 

 

  

 

 

 

Esta entrada fue publicada en EVENTOS SOCIALES Y CULTURALES. Guarda el enlace permanente.

Deja un comentario